Estas alubias estofadas con castañas son testimonio del papel que tenían las castañas en la alimentación ibérica precolombina, antes de que trajésemos las patatas de América y se introdujeran en toda nuestra cocina y la del resto de Europa. Hala, lo que ha dicho.
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Índice
Las castañas y su devenir
- Soy gran forofa de las castañas, sobre todo asadas y crudas. En los guisotes medievales y anteriores al Medioevo se usaban las castañas como legumbres, pues era costumbre secar las cosechas de castañas hasta ponerlas pilongas. En esta forma desecada se conservan muchísimo tiempo en buen estado. No sé ahora, pero cuando yo era nimia se vendían castañas pilongas en las tiendas de frutos secos y variantes. Las que habré comido yo…
- Existe la idea generalizada de que fueron los romanos quienes trajeron las castañas a la Península desde Asia Menor, pero hay hallazgos que lo desmienten. En yacimientos arqueológicos y turberas se ha encontrado polen de castaño; en un yacimiento de Buyo, Lugo, de hasta casi 8000 años de antigüedad. Parece que los castaños hace muchos siglos que habitan entre nosotros.
- No es raro, pues, que se aprovechara tan nutricio fruto, del que además puedes disfrutar todo el año en versión desecada.
La receta de las alubias con castañas
- La receta procede de The Food from Spain, de Claudia Roden, uno de mis recetarios favoritos, del que ya tengo más recetas en el blog. A pesar de que solemos relacionar las castañas con el norte, en particular con Galicia y Asturias, dice la señora Roden que esta receta es andaluza; los lectores andaluces quizá nos puedan aportar sus conocimientos.
- Me llamó la atención que, a pesar de ser un guisote salado, lleva canela y clavo, combinación que me encanta. Con estas especias en su composición no creo que fuera un plato de pobretones, al menos en origen, por muy populares que fueran las castañas.
- El plato se puede elaborar en versión vegetariana o rematarlo con unos buenos chorizos, como cualquier cocido.
- Puedes hacer el guiso tan cómodo como quieras: usando castañas y alubias ya envasadas, o cociendo las alubias desde crudo y cocinando las castañas crudas (y permutaciones de estos dos elementos). Con la versión envasada la elaboración es mucho más rápida.
- He usado unos magníficos judiones de La Granja de San Ildefonso, pero cualquier alubia blanca sirve, siempre que sea de calidad y no del Paleolítico inferior.
Vídeo: cómo se hacen las alubias con castañas
En poco más de 2 minutejos:
Antes de ponerte manos a la obra:
- lee la receta completa o mira el vídeo,
- asegúrate de que tienes todo lo que necesitas y
- entiende el proceso.
Dificultad: ninguna.
- 500 g de alubias blancas previamente cocidas (peso ya cocidas)
- 250 g de castañas, peso ya cocidas o asadas (según la castaña, hasta 500 g en crudo con cáscara)
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1 palo de canela
- 2 clavos de olor
- Algo de agua
- 3 chorizos para guisar (facultativo)
- Sal
- Si vas a cocer las alubias en casa, ponlas en remojo la noche anterior. Al día siguiente, cambia el agua, llévalas a ebullición bien cubiertas de agua y cuece a fuego lento, vigilando que no les falte agua en ningún momento, hasta que estén tiernas.
- Corta la cocción con algo de agua fría, sala y reserva.
- Haz un corte en la cáscara de las castañas para que no reviente y cocínalas en el microondas o en agua hirviendo hasta que se puedan pelar. Para hacerlas en el microondas aplica la máxima potencia un par de minutos, aunque depende de la potencia de cada horno, claro está. Están listas cuando están semicocinadas y se pueden abrir y pelar.
- Debes obtener los 250 g de castañas peladas.
- Pica o lamina una cebolla y póchala en algo de aceite de oliva hasta que esté lacia y transparente.
- Mientras, maja los dientes de ajo y añádelos al sofrito cuando esté lista la cebolla. Dales una vueltas.
- Agrega el palo de canela y los clavos, y cubre las castañas con agua. Cuece unos 15 minutos, hasta que las castañas acaben de ablandarse.
- Añade las alubias, cocidas en casa o de conserva (estas con su líquido), y dale a todo junto un hervor de 5 minutos.
- Si vas a poner los chorizos, fríelos un poco en algo de aceite de oliva a fuego medio-alto, y añádelos al guiso en el último minuto. Sala ligeramente y sirve calentito.
Dudas y consejos sobre las alubias estofadas con castañas
- —Entonces, ¿puedo prescindir del chorizo para hacer el plato más ligero o vegetariano?— Sin problemas; el sabor será distinto, pero igualmente rico.
- —¿Por qué fríes los chorizos aparte en lugar de cocerlos dentro del guiso?— Porque así dan menos sabor; el sabor del resto del guiso es delicado, así evito que el chorizo domine el sabor conjunto por completo. O eso creo yo.
- —¿No resulta raro el especiado con la canela y el clavo?— En absoluto, está riquísimo.
- —¿Puedo usar castañas envasadas?— Sí, las hay ya cocidas de buena calidad.
- —¿Me recomiendas algún tipo de alubia blanca?— No, cualquier clase de alubia puede dar buen resultado, siempre que sea de calidad y de la temporada.
Referencias
- The Food from Spain. Claudia Roden
La chefa recomienda
Más ricos platillos brutales de legumbres para el otoño:
- Alubias estofadas con aceitunas
- Mujadara
- Alubias en tarro
- Salsa boloñesa de lentejas, vegetariana
- Cocido madrileño
- Fabada asturiana
- Caldo gallego
Como adoro las castañas, estas alubias estofadas con castañas me requeteencantan; la canela les da un aroma sutil que no se da de tortas con los chorizos en absoluto. Riquísimas.
Paqui dice
Este guiso tiene buenísima pinta!.
Una pregunta, Miriam: Mi abuela empleaba el líquido de conserva de las alubias. Yo lo desecho, pero no sé muy bien porqué. En tu receta dices que se debe usar… ¿cuál es el motivo?
Gracias
Miriam Garcia dice
La pregunta es por qué desecharlo, es líquido de cocción y si el guiso que estás haciendo tiene líquido, por qué no vas a ponerlo? Tiene todo el sabor de las legumbres :).
Rosa dice
Hola! Se pueden usar castañas pilongas? Un abrazo
Miriam Garcia dice
Siempre que las remojes antes como una legumbre, sin problema.
Juan Miguel dice
Hola!
El clavo es una especia muy habitual en la gastronomía andaluza, principalmente para platos «salados». Lo sé bien que soy cordobés 😉
En cuanto a la canela, tampoco es extraña a los guisos. Mi madre siempre ponía un trocito de ésta en rama en las lentejas!
Supongo que será tradición de los tiempos de la presencia árabe/bereber, digo yo…
Saludos
Miriam Garcia dice
Es una combinación fantástica :).
Gloria Lopez dice
De mis años en Asturias me traje muchas recetinas de la gastronomia popular que se hacen en las casas asturianas de siempre.
Todos los 1 de noviembre, coincidiendo con la celebración de la fiesta del «amagüestu» (que en bable significa «asar castañas» y que es una fiesta de origen celta que sirve para celebrar el paso al invierno) la gente se reúne para recoger castañas asturianas y beber sidra (dos de los productos asturianos por excelencia). La castaña era una de las principales fuentes caloríficas durante el invierno entre la gente humilde y las «muyeres» las introducían en sus guisos.
De entre esas «recetinas» me traje la del «POTE DE CASTAÑAS» que hago al menos dos veces durante el invierno en casa.
Aunque hay varias versiones, hay quienes les ponen berza o repollo, setas e incluso patata por aquello de que es un pote (pero la patata apareció mucho después de que se hiciera este plato), yo la hago como la fabada asturiana sustituyendo la «faba» por castañas que previamente he pelado. El resultado es un guiso suave y menos «indigesto» aunque igual de rico. Chorizo y morcilla asturianas, lacón y castañas. Te invito a que pruebes a hacerla y me cuentes. Besos
Miriam Garcia dice
Qué rico, muchas gracias por la receta 🙂
mariola dice
Hola Miriam, soy muy fan tuya! Gracias por todas tus recetas!
¿Es verdad lo que se dice que los guisos y algunas otras comidas están más ricos al día siguiente que recién cocinados? ¿En este caso también?
Mil gracias!
Miriam Garcia dice
Sí, es así, los sabores se difunden y unifican, y el guiso espesa más.
Mariola dice
Gracias Miriam, otra cosa, en el mercado me han vendido judías «carillas» que son chiquitinas y con una pinta negra porque me ha dicho que eran exquisitas y me iba a quedar el guiso mucho mejor… siempre me venden lo que quieren… de hecho su nombre está bien puesto porque costaban 17€/kg… Las conoces?
Y otra cosa, si he comprado 500gr de secas, cuando las ponga en remojo pesan el doble? Es por calcular porque tú dices 500 ya remojadas…
Gracias!
Marioal
Miriam Garcia dice
La verdad, no creo haber probado nunca las carillas, aunque sí las conozco de nombre. Por ese precio ya pueden ser buenas… En cuanto a la cantidad de agua que puedan absorber, pues no sé decirte, depende de cada alubia, pero supongo que pueden llegar a doblar el peso.
NiEstá dice
Después de tanto comentario, no sé si alguien le prestará atención al mío 🙂
Yo nunca he comido castañas en guiso. Lo que quiere decir que en la tradición culinaria de mi madre la castaña no era un ingrediente, a no ser para comerlo crudo. Y cuánto cuidado para comerlas sin mancharnos la ropa. Las manchas de la castaña erá muy difíciles de quitar, si no imposible. Fíjate que yo no sabía que las castañas pilongas (preciosa palabra) eran castañas secas. ¡Qué sabor!
Perdí la costumbre de comer castañas crudas en mi época de Almería. No me preguntes por qué, pero así ha sido. Y en honor de la verdad, las echo de menos. Bueno, no es que no haya castañas por aquí, que las hay y muchas, lo que echo de menos es el hábito de sentarme a la copa (*) y comer castañas crudas. Eso sí, sin mancharme y sin manchar el paño de estufa.
(*) es el nombre que recibe el brasero en mi tierra de origen. Y el paño de estufa, pues eso, el paño que cubre la mesa camilla. Si una cosa me duele de esta vida itinerante, es el vocabulario. Después de llevar media vida (literal) fuera de Chipiona, he casi perdido el vocabulario autóctono. No es que no lo entienda. No, que por supuesto que lo entiendo. Pero hay palabras y expresiones que no me salen del tirón, y para decir lo mismo uso un vocabulario más neutro. Una pena.
Miriam Garcia dice
Yo te presto atención, copón!XD
A mí me encantan las castañas crudas. Y qué bonitez de localismos <3. Cuando uno vive fuera se contamina y descontamina, es así...
Elena A.N. dice
Gracias Miriam! Segundo año que repito este delicioso plato en temporada de castañas frescas. Todo un descubrimiento en casa.
Miriam Garcia dice
Me alegro de que os gusten, gracias por venir a contármelo 😉