Una receta de gambas al ajillo no puede fallar nunca porque es una tapa de lujo si las gambas son de calidad y además permite mojar pan como si no hubiera un mañana.
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Índice
Las gambas al ajillo y su devenir
- Son un plato popular de origen incierto, como casi todas las recetas tradicionales, que aparece fundamentalmente en el sur y el centro de España.
- Las colas peladas de las gambas se rehogan con ajo picadito y algo de guindilla para darles un toque picante. El aceite de oliva hace el resto.
La receta de las gambas al ajillo
Ningún misterio, casi de cualquier forma que hagas las gambas están buenas:
- La cantidad de ajo es bastante personal, al igual que la cantidad de picante, pero lo suyo es que vayan bien cargaditas de ajo.
- Por mi parte, prefiero un toque algo sutil de picante. Aunque el que haya utilizado guindillas sabrá que el grado de picante es una lotería.
Vídeo: cómo se hacen las gambas al ajillo
En menos de 1 minuto:
La bonica sartén de hierro en la que preparo las gambas la tienes en la tienda Claudia & Julia.
Vamos con ella:
- 500 g de gambas frescas y de calidad
- 4 dientes de ajo picados o en láminas
- 1 guindilla seca
- 50 ml de aceite de oliva virgen
- 1 chorrito de jerez seco o manzanilla
- 1 buen puñado de perejil
- Lava las gambas y pélalas, quitando la cabeza y la cáscara de la colita, dejando esta limpia. Mantenlas húmedas mientras las pelas todas.
- Pela los dientes de ajo y pica o lamina, como más te guste. Parte la guindilla en anillas (yo la humedezco un poco en agua previamente si está muy seca, para que no se desbarate al cortarla).
- Pon el aceite en una cazuela baja o sartén, y calienta a fuego medio. Sofríe el ajo hasta que justo empiece a dorarse, así como la guindilla.
- Añade las colas de las gambas y dales unas pocas vueltas solamente; añade el chorrito de vino, apaga el fuego, tapa y deja que se hagan con el calor residual, deben quedar jugosas por dentro y no completamente consumidas.
- Sirve con abundante perejil cortadito espolvoreado por encima.
Dudas y consejos sobre las gambas al ajillo
- —¿Cómo sé si las gambas son de calidad?— Comprándolas en un sitio de confianza y por el precio… esto es como el jamón, cuanto más caras, mejores.
- —¿Puedo usar colas de gamba congeladas?— Como poder, puedes, yo también las uso de vez en cuando. Pero suelen soltar más líquido y quedarse más consumidas que las gambas frescas, ojo con eso.
- —¿Puedo poner menos ajo?—Es posible, pero entonces ya no tendrás unas gambas al ajillo, serán otra cosa.
- Las gambas deben cocinarse, pero no consumirse; el interior debe quedar jugoso. Si haces las gambas en una cazuela de barro o hierro como yo, el calor residual del cacharro es más que suficiente para que las gambas se cocinen. Si usas otro recipiente que retenga menos el calor, como una sartén de aluminio o similar, puede que tengas que prolongar algo la cocción antes de apagar el fuego.
- —¿Es imprescindible ponerles el vino fino?— No, pero les da un toque muy rico. Prescinde de él, no obstante, si no quieres ponerle vino.
Referencias
- Gambas al ajillo. Enciclopedia de Gastronomía
La chefa recomienda
Más deliciosos platillos de pescado y marisco:
- Brandada de bacalao
- Zamburiñas al horno
- Caldereta de pescado y marisco
- Pescado en amarillo
- Salteado de atún y tirabeques
- Boquerones amoragaos
- Sardinas a la plancha
- Berberechos con patatas guisadas
- Salpicón de pescado y marisco
- Verdinas con marisco
El secreto de unas buenas gambas al ajillo está en un género de calidad y en no pasarse con el punto de cocción, amén de preparar un buen pan para mojar la salsilla… porque os la acabaréis. Palabra de ceboncito.
Jaime dice
Si la gamba es fresca, es recomendable exprimir unas cuantas cabezas sobre el ajo picado o bien hacer un aceite de cabezas de gamba sofriendo éstas y posteriormente filtrando el aceite para luego realizar todo el proceso: ajo y colas de gambas.
Miriam Garcia dice
Excelente consejo, muchas gracias!
Sofía Serra dice
Nunca con vino (fino o el que sea), pero las probaré. Soy de las de cuatro guindillas y nunca perejil (seca mucho). Pero tiene su sentido con vino. Gracias. Aparte: ¿son tuyas las fotografías? (Doy por sentado que sí, pero me gustaría que te explayaras 😉 ).
Miriam Garcia dice
Sí, son mías, soy fotógrafa. Puedes leer mi historia en la página sobre mí 🙂
Sobre mí
Sofía Serra dice
Gracias y discúlpame, por favor, no entiendo por qué no lo vi, tu «Sobre mí». Ahora ya te conozco mejor 🙂 . Un saludo.
Paco Jiménez dice
Con un buen vino fino. De Montilla, Chiclana, El Puerto de Santa María. Hay visa más allá del jerez y la manzanilla.
NiEstá dice
Con esto «del interné» y la globalización, las gambas al ajillo se han extendido por el mundo entero. Si no entero, por la parte que nos corresponde. Cuando yo me mudé a Almería, allá por el año olímpico y expouniversal, las fabulosas gambas rojas de Garrucha se comían sólo a la plancha. Es cierto, y no quiero molestar a nadie, que los almerienses están faltos de imaginación culinaria 😛 Y allí llegué yo, con mi saber hacer en gambas al ajillo. porque aunque yo sabía poco de cocina por aquella época, las gambas al ajillo no necesitan casi ningún saber si las gambas son buenas. Éxito total, claro.
Aunque yo siempre dejo comentarios que por lo general sólo me afectan a mí, hoy no lo voy a hacer. Las mejores gambas al ajillo que podrá cualquiera comer es en el bar de mi cuñado. No es porque sea mi cuñado, ya era el mejor bar de tapas de la zona cuando él ni siquiera consideraba convertirse en mi cuñado. Gambas del mar de allí, estupendas donde las haya. Si andáis por la zona, no os perdáis el Bar La Aurora, en Chipiona. (No me borres este párrafo :))
Miriam Garcia dice
A la plancha muy ricas también! Pero estas tienen la ventaja de mojar pan XD. Me quedo con la recomendación si voy por Chipiona ;).
María dice
Gracias por la receta “no receta”, mira que son fáciles pero nunca las había hecho, y gracias a ti y a tus fotografías tan bonitas, me decidí anoche a hacerlas y genial!. El toque del vino es sutil….nos faltó pan.
Miriam Garcia dice
Qué bien, pues me alegro de que te hayas animado y de que las hayáis disfrutado :). Besos.