En los Estados Unidos a las minihamburguesas las llaman sliders, con esa facilidad que tienen ellos para hacer pasar por variedad lo que es el mismo perro con distinto collar. Que no se me ofenda nadie, porque no lo digo como algo negativo, aquí estoy yo copiándoles la idea. En estos panecillos de slider, de unos 8 cm, se suelen servir hamburguesas, pero también se rellenan con otras cosas. Así que como tenía ganas de probar panecillos de hamburguesa novedosos para mis churumbeles, opté por una recetuela de Dan Lepard (como no) para hacerla en tamaño nimio. Procede de Short&Sweet, del que ya os hablé aquí y aquí. Así que estas coquetas minihamburguesas con pan de cerveza y avena se convirtieron en un cruce de cocina estadounidense y de pub británico, porque a estos panecillos los llama Mr. Lepard panecillos de cervecería.
Los panecicos llevan copos de avena, miel y cerveza, una combinación explosiva que les da muchísimo sabor en comparación con el pan de hamburguesas más corriente, y no me refiero al que se compra hecho (que no sabe a nada, básicamente), sino al pan de hamburguesas casero, que se suele asemejar más a una masa de brioche en plan modesto. Salen tiernos, esponjosos y tostaditos por fuera. Son la repera, os los recomiendo. Primero vamos con la receta de los ricos panecillos:
- 75 g de copos de avena
- 440 ml de cerveza
- 20 g de mantequilla
- 20 g de miel
- 470 g de harina panadera
- 50 g de harina de fuerza integral de trigo
- 2 cucharaditas de levadura liofilizada
- 2 cucharaditas y media de sal
- Se tuesta la avena en una sartén, sin aceite ni nada, removiendo sin parar para que no se requeme.
- Se pone la avena con la cerveza en un cazo y se calienta hasta que rompa a hervir. Veréis que los granos se esponjan. Se retira del fuego y se añaden la mantequilla y la miel. Se remueve y se deja enfriar.
- Se mezclan los sólidos y se añade la mezcla de cerveza cuando esté templada. Se amasa hasta obtener un desarrollo razonable del gluten.
- Se hace una bola con la masa, se pone en un recipiente aceitado, se tapa y se deja doblar. Yo hice la masa por la tarde y la retardé toda la noche en la nevera.
- Una vez levada la masa, se vuelca en la encimera, se desgasa y se hace un rollo. El peso total es de unos 1100 g, por lo que yo hice 20 panecillos de unos 55 g, aunque no los peso, los divido a ojo, por eso salen tan bonitos... ejem.
- Se forman y bolean los panecillos y se ponen sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Se tapan bien con plástico y se deja que leven alrededor de un 50%.
- Mientras, se pone el horno a calentar a 210ºC. Cuando está bien caliente y los panecillos suficientemente levados, se pueden rociar los panecillos con agua y espolvorearlos con copos de avena antes de meterlos al horno (1).
- Se mete la bandeja en el horno (yo la meto sobre la piedra para pan) y se quita el aire (si es que calentáis el horno con aire). Se vaporiza con la piedra volcánica y se hornean 20 minutos (2).
- Al cabo de los 20 minutos se puede conectar el aire a 180-190ºC para dorar los panecillos, durante otros 15-20 minutos.
- Se sacan a una rejilla para enfriar, con el papel.
2. Si sacáis los panecillos en este punto, podéis congelarlos, después de dejarlos enfriar bien. Para comerlos se meten congelados directamente en el horno 5 minutos a 180-200ºC. Como recién hechos.
Y ahora con las hamburguesas, que no tienen ningún misterio:
- 500 g de carne picada (cuanto mayor calidad, pues mejor)
- 1 huevo
- 1 ajo pequeño
- 20 g de tocino ibérico
- 1 pelllizco de nuez moscada
- Sal
- Se pone la carne en una ensaladera. Se bate el huevo y se añade a la carne, junto con el ajo majado en mortero y la nuez moscada.
- Se corta el tocino ibérico en pedacitos a cuchillo, lo más pequeño que se pueda, y se añade también a la carne.
- Se amasa todo bien con la mano (con un tenedor si sois muy asquerositos), hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- Se van tomando bolas y se forman hamburguesas que cuadren con el tamaño de los panes. Hay que tener siempre en cuenta que menguan al cocinarlas, por lo que deben ser un poco más grandes que el diámetro del pan (a mí siempre se me olvida esto).
- Se cocinan en una buena plancha a toda pastilla y se van salando sobre la marcha.
Como mis churumbeles son más bien rancios, se comen las minihamburguesas solo con ketchup, que esta vez era casero… sí, la receta del superketchup en el capítulo siguiente (y aquí tenéis otro ketchup a la antigua, fermentado). Y yo, que soy más aventurera (oh, yeah), les puse a mis bocadillitos unas rodajitas de pepino fermentado casero también, de los dos pepinos que recogimos en mis plantas este verano. Qué barbaridad de cosecha. Como considero los pepinos una de las cosas más insulsas que campan por la faz de la tierra, se me ocurrió fermentarlos en rodajas para darles un poco de gracia. Y el resultado del experimento me ha gustado, ya os lo contaré otro día, que tenemos que acabarnos estas minihamburguesas con pan de cerveza y avena… voy por el Alkaseltzer.
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zer0gluten dice
Aunque esos panecillos son una bomba de gluten, no dejo de reconocer que tienen una pinta fabulosa.
Esas fotos son increíbles Miriam.
Mira que es temprano y dan ganas de pillar una patata frita, jaja.
Un beso grande.
Sarmale dice
Sí que tienen buena pinta, sí. Me compré una panificadora porque tengo un horario de mierda. Salgo a las siete de la tarde (ay, Dios, tengo que limpiar la cocina… a esas horas «de la noche»). Y nunca hago pan a mano por aquello de la espera (acabaría horneándolo a las cuatro de la mañana). Pero me quedaré en casa un fin de semana para hacer un montón de bollitos de estos… y congelarlos. Casi se pueden oler!
Lolah dice
Qué ganas me han dado de ponerme a hacer esos mini panecillos!…La pena es que no como hamburguesas, aunque por probar una de estas pequeñitas no pasaría nada…
un beso.
Yolanda - Magdalena de Chocolate dice
Qué buenísimos esos panes! Hace poco hice también unos con avena, pero sin cerveza, así que me apunto los tuyos para probarlos 😀
Un beso!
Chez Silvia dice
Me encantan como te han quedado estos panecillos, la foto de los panecillos levando es fantástica!! No hay como las hamburguesas caseras!!! Besote y feliz semana:)
Amiloquemegustaescocinar dice
Admirando estas fotos a mí lo único que se me ocurre decir es: WOW! Que vivan los States!! y tus manos que son de oro 🙂
Guestofwinter dice
:O gracias, guapa! Muaks.
Jonny dice
Miriam: que ricos hamburgesas con tocino iberico! Y la adicion de un poco de nuez moscada es un gran ideo tambien. Son todos tipos de slider en los Estados Unidos ahora – cordero, atun, champinones, etc. pero no lo veo jamas con tocino iberico. (Pido disculpas por mi mal castellano.) Saludos, Jonny & Amy.
By the way – i looked up the word «churumbeles», and saw that it meant child in gypsy slang, but I’m still not sure I understand what you mean above, but i love the word. Just saying it makes me happy.
Guestofwinter dice
Hi Jonny! No need to apologize, your Spanish is much better than many Spaniards’ English. Churumbel is indeed gipsy language, called «caló». There are many gipsy words that have been adopted as Spanish through the ages, they all sound wonderful.
Nuria dice
Me lo llevo todo, los panecillos se ven deliciosos o con cualquier cosa y las hamburguesas con el toque del tocino han de estar muy ricas…besos
Mar Martinez dice
Este finde me pongo con ellos, porque verlos y salivar ha sido todo uno! 😀
Rosa dice
Qué receta más buena, tanto los panes como las hamburguesas. Me quedo esperando la receta del ketchup, en cuanto la tenga no lo compro más.
Mayte dice
Nada que me los devoro…mi madre siempre me riñe cuando hay hamburguesas porque como el pan primero y luego si me queda espacio el resto…jajajaja 😉
Besotes.
Mónica-Recetas de Mon dice
Me encanta. Tengo que probar a hacer estos panecillos que seguro que están riquísimos y a los peques les encantarán!!
Besos
Helena / Rico sin Azúcar dice
Deliciosos, Miriam, me encantan las masas «enriquecidas» con cosas y la cerveza es un punto a favor! Jo, y qué apetitosos con las mini-hamburguesas, menudas fotos, casi se pueden oler 😉
Besotes
Akane dice
Si tú dices que unos panecillos son la repera, me obligas a guardar la receta! En serio, tienen un aspecto increíble, como todos tus panes. Sliders o mini hamburguesas, el nombre importa poco cuando el resultado es irresistible.
Un abrazo!
Raquel@TratadeCocinaR dice
Mira con esas fotos ¡que fotos! salgo con la moral por los suelos no se como me atrevo a poner algo en el blog jaja que me rio por no llorar… son preciosas de verdad.
Besicos sorianos 🙂
Guestofwinter dice
Ah, nonono, basta de tontunas. Mira mis fotos de hace un par de años y te tronchas de risa.
SUSANNA dice
Hola Miriam guapa tu
Me parecen divinos, con tu permiso me tomo buenisima nota
mil petonets Susanna
mila dice
Jolines, que envidia mas sana !! Menuda pinta tienen tus super hamburguesas. Parecen fáciles de hacer pero luego te pones y seguro es complicadisimo !!Pero visto lo bien que te quedan …. Debería intentarlo un par de veces (o mas) a ver como me salen !!
voy a cotillear tu blog que suerte haberte encontrado !!
un besete
mila
Chelo.- Cogollos de Agua dice
Pues me apunto a esas minihamburguesas, hijas que manitas tienes para el pan, todos te salen bien, guapos , fotogénicos y estoy segura que riquisimos. Eres más chula!
Guestofwinter dice
No, hija, es que los que me salen mal no los enseño XD
ivana dice
me chiflan estos mini bocados!
tengo hambre!
besos
Ra dice
Los panecillos, maravillosos. El conjunto, de empezar y no parar, supongo. Y otra más que va directa a la carpeta de «recetas pendientes»…a la espera de tu ketchup casero.
Los dibujos de Alapapajú dice
Ya me la he copiado para hacerla, junto el ketchup casero que has subido. A ver si caen el fin de semana. Gracias 😉
Los dibujos de Alapapajú dice
Hoy hemos hecho en casa los panes de avena y cerveza, estan tremendos de ricos, crujientes por fuera y tiernos por dentro. Muchas gracias por la pedazo receta, a ver si la próxima vez nos lanzamos con el ketchup casero, que al final no lo hicimos, pero pendiente queda
Guestofwinter dice
😮 qué bien! A mí me encantaron los panecillos, los repetiré sin duda. Y si pruebas el ketchup, ya me contarás! ;))
silvia sevcik dice
Haréestos panecillos hermosos, con la proporción de harinas al revés. Que también soy diabética y quiero consumir más fibra. Le hecharé unos 50 ml. de cerveza.
Y aquí la pregunta del millón: Qué tipo de cerveza se utiliza ????….. Puedo comprar la que indiques, pero en casa tengo Porter, que es muy especial. No creo que la pueda usar, ya que tiene un gusto muy fuerte.
Qué me aconsejas ???
Miriam, quiero decirte que tu blog es lo mejor que he visto, en materia de comida sana y novedosa. Te felicito por tu entusiamo, por darnos tus conocimientos (da gusto leerte) y por todo el trabajo y tu tiempo, que nos los regalas. Un GFRACIAS, Miriam… muy profundo y sentido.
Miriam Garcia dice
Hola, Silvia: pues yo creo que eso va un poco en gustos, tampoco soy yo ninguna experta en cervezas. Obviamente si la cerveza es fuerte se notará más el sabor, pero igual hay a quien le guste. El sabor se aprecia bastante, así que si no estás segura es mejor empezar por una cerveza suave :).
silvia sevcik dice
Miriam, releí, ahora, mi comentario. Quise decir que le volcaré 50 ml. MÀS, de cerveza ! jejeje… Saludos
Miriam Garcia dice
XD