La leche frita casera es de esos postres estupendos que se arman con ingredientes sencillos y que todos tenemos en casa: una masa de leche, azúcar y harina, como una papilla sólida. Primigenia a más no poder.
La leche frita casera es fácil de hacer, no dejéis que os convenzan de otra cosa, y tenéis un vídeo para comprobarlo. A mí el nombre siempre me ha parecido poco glamuroso… pero bien hecha, con cariño como si la hiciera tu abuela, qué rica está, repámpanos.
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Índice
La fórmula de la leche frita casera
La leche frita consiste en porciones rebozadas y fritas de una masa cocida que se prepara con:
- Leche,
- azúcar y
- harina.
Se sirve de la maravillosa capacidad de los almidones de la harina para gelificar y espesar los líquidos al calentarlos, de la que ya hablé en mis artículos sobre croquetas (que se basan en el mismo principio).
Se suele aromatizar con canela o limón, y el interior queda cremosísimo.
Como ocurre con muchas elaboraciones populares, aunque sabemos que se originó en el norte de España el momento exacto es incierto. Y precisamente por su carácter popular existen tantas variantes de la receta como casas y abuelas castellanas, cántabras, vascas, asturianas o gallegas.
La receta de la leche frita
Para este postre típico de Semana Santa en muchas regiones me guío por la receta de Martín Berasategui en Cocina en casa con Martín Berasategui, ese libraco que deberíais tener ya (Martín, recuérdame que te pida comisión).
Pero hay tantas variantes como abuelas:
- Hay quien añade yemas de huevo a la masa y quien no (esto también ocurre en las croquetas).
- Hay recetas que llevan solo harina de trigo, otras fórmulas se hacen solo con maizena (sin gluten si también se rebozan en maizena) y en otros casos se mezclan ambas harinas, como en esta receta.
- El aromatizado también varía, desde solo cáscaras de cítrico a la canela que uso aquí. Los más ambiciosos podéis usar ambos aromatizantes.
Vídeo: cómo hacer leche frita casera
En menos de 2 minutos:
Da igual, la leche frita siempre está deliciosa. Vamos con los detalles de la receta y no olvidéis consultar las dudas y consejos más adelante:
- 1 litro de leche entera
- 200 g de azúcar (o cantidad equivalente de vuestro edulcorante sólido favorito)
- 1 palo de canela
- 50 g de harina corriente
- 50 g de Maizena
- 2 huevos
- Harina adicional para rebozar
- Aceite de oliva suave para freír
- Azúcar y canela molida adicionales para espolvorear
- Elegimos una fuente en la que nos pueda caber el litro de leche (ocupará un poco más por las harinas y el azúcar) con una altura de unos 2-3 cm, para luego cortar cuadrados de esa altura.
- Tomamos un cuarto del litro de leche e hidratamos ambas harinas en él, removiendo. Reservamos.
- Llevamos a ebullición el resto de la leche con el azúcar y el palo de canela. Cuando casi hierva apagamos el fuego, tapamos y dejamos templar para que la leche se aromatice.
- Retiramos el palo de canela y agregamos la papilla de harina. Calentamos al fuego y cocemos por lo menos 8 minutos, sin parar de remover con cuchara de madera porque se pega en el fondo. En cualquier caso, si se forma algún grumo, se mete una batidora de mano antes de tener lista la crema.
- La crema debe quedar espesita, para que una vez fría se pueda cortar sin que se desbarate. No debe llegar a despegarse de las paredes del cazo, como ocurre con las croquetas, pero casi, casi.
- Cuando esté lista la crema, retiramos del fuego y la vertemos en la fuente llana y lisa elegida, que habremos untado previamente con un poco de aceite para poder despegar bien la crema o forrado con papel de hornear, igualmente untado con algo de grasa o forrado de plástico.
- Dejamos enfriar por completo con un plástico por encima, para que no se forme piel.
- Cuando la crema esté fría (al igual que las croquetas, mejor dejarla toda una noche en la nevera) la cortamos en cuadrados no muy grandes; hay que tratarla con cariño porque es bastante tierna.
- Rebozamos primero en harina y luego en huevo batido.
- Freímos a fuego medio las porciones de leche frita en una sartén pequeña o un cazo, con abundante aceite suave, que las cubra por lo menos hasta la mitad.
- Freímos por ambas caras y las pasamos a una fuente con papel de cocina, para que absorba algo de la grasa.
- Servimos los cuadrados de leche frita con azúcar y canela molida espolvoreados por encima.
Dudas y consejos sobre la leche frita casera
- La leche frita es un postre fácil, está muy rica recién hecha, templadita, pero aguanta bien y se puede tomar fría perfectamente. En cualquier caso, siempre es posible darle un golpecillo de horno.
- La masa de la leche frita se puede hacer perfectamente en Thermomix, que es fantástica para cualquier tipo de cosa similar a bechamel-croquetas.
- Si quieres hacer la leche frita sin gluten, es facilísimo: no tienes más que usar solo harina sin gluten como maizena, tanto en la masa como al rebozar los cuadraditos.
- Al igual que las croquetas, la masa se pone más firme y manejable si la dejamos toda una noche en la nevera. No es imprescindible, pero por otro lado permite organizarse preparando la masa un día y fríendo las porciones al día siguiente, si nos viene bien así.
- —¿Puedo freír con aceite de girasol?— Claro, se trata de hacerlo con un aceite suave que no dé un sabor muy aparente, ya sea de oliva, girasol o el que prefiramos.
- Cuando hago dulces sin azúcar (los tomo con muy poca frecuencia) utilizo el edulcorante tagatosa, pero se puede utilizar cualquier otro endulzante sólido de los que se encuentran hoy día en las tiendas. Si queréis saber algo más sobre edulcorantes, aquí tenéis un pdf descargable. No es que no podamos utilizar edulcorantes líquidos, pero tendríamos que ajustar la proporción de leche de la receta.
- —¿Puedo preparar la leche frita con antelación?— Relativamente… te puedes planificar para hacer la masa un día, que no se tarda nada, y cortar las porciones y freírlas al día siguiente. Y como he dicho antes, se puede comer del tiempo o templar un poco en el horno.
La chefa recomienda
Otros dulces populares, de Semana Santa u otras épocas:
- Flan de huevo casero
- Natillas caseras
- Flores de Carnaval
- Bollos suizos
- Tocino de cielo
- Torrijas de leche
- Bartolillos madrileños
- Tortas de aceite
- Coca de San Juan
- Quesada pasiega
- Tortas de Alcázar
Os dejo que tengo una fuente de leche frita casera esperándome y yo soy muy educada. Que hay que ver cómo se pone de exaltada si no le prestas atención…
Pat dice
A mí con este manjar me pasa lo que dices al principio, que su nombre me echa patrás ( me recuerda a » sangre frita», puaj) y por eso nunca me he puesto a ello. Pero tiene una pinta estupenda y además parece muy fácil de hacer, las famosas tres b, en una palabra. Hala, te dejo ya, no vaya a ser que se ofenda…
Miriam Garcia dice
XDD
Javier dice
Ya sabeis «ambiciosos»: podeis usar canela si teneis el valor suficiente 😀
Esta Miriam es para mondarse.
Miriam Garcia dice
;)).
Isabel dice
Hola Miriam,muy buena receta,yo la hago también con harina y menos cantidad de maicena,queda más cremosita,y para un extra de cremosidad añado una cucharada generosa de mantequilla cuando casi está cocida.
Miriam Garcia dice
Mmmm, muchas gracias por la sugerencia, besos.
José dice
Llevo tiempo suscrito a tu blog. Fabuloso!
Felicidades
Miriam Garcia dice
Gracias, José :).
Patricia dice
Este dulce es un pecado en toda regla, y de mucho agrado me pasaba yo ahora mismo un buen rato pecando con esa bandeja! Me ha encantado la receta, un besazo!
Miriam Garcia dice
Un abrazo :).
NiEstá dice
Pues mira por donde a mí el nombre me gusta 🙂 ¿Será que yo soy muy de postres fritos, como buen andaluz que soy? Tortas de viento (si me admites la sugerencia, investígalas. Te paso si quieres la receta del libro editado por la Asociación de Amas de Casa de Chipiona, aunque sea de una precisión pasmosa), roscos de vino, torrijas, pestiños y ese largo etcétera que alegra la Navidad y la Semana Santa.
No os podéis imaginar el éxito que tienen por estas tierras; ellos, que son muy aficionados a hornear, se sorpenden de las maravillas que pueden salir de una buena fritanga 😛 Como soy un valiente, las hago con limón y canela… ¡que no falte de nada!
Saludos
P.D.: Acabo de ver tu receta de las tortas de Alcázar. No sé cómo se me ha pasado. El caso es que me creo que son lo mismo que los mostachones de Utrera… Por Utrera pasaba mucho de pequeño cuando íbamos al pueblo de mi padre y, claro, comíamos. Alcázar de San Juan siempre me ha cogido más a trasmano, así que no puedo comparar.
Miriam Garcia dice
Pues sí, lo que llamaban antaño las frutas de sartén… hay cosas riquísimas. Qué bonito el nombre d tortas de viento, me encantaría la receta!
NiEsta dice
Pues mira, un paisano mío la tiene en su blog. La encontré hace tiempo, pero no me acordaba 🙂
Luego copiaré aquí la del libro de las Amas de Casa de Chipiona, para público conocimiento.
http://elcorraldelalonguera.blogspot.cz/2011/12/dulce-navidad.html
Saludos en este primer día de primavera a ¡-4 grados!
Miriam Garcia dice
Qué bien, gracias! A ver si estas vacaciones tengo tiempo de probarlas ;). Aquí no llegamos a esa temperatura, pero está nevando! Un abrazo.
NiEstá dice
Lo prometido es deuda. Aquí te transcribo la receta del libro de la Asociación de Amas de Casa de Chipiona. No, no me he olvidado de las medidas ¡es que no vienen!
Ingredientes: 1 kg de harina, levadura de pan, naranja agria, matalahúva, aguardiente, aceite, azúcar, sal
Preparación: en un poco de aceite, freiremos una cáscara de naranja agria y un poco de matalahúva. En un lebrillo ponemos la harina abriendo un hoyo en el centro.
En agua templada y un poco de sal, se deslía la levadura añadiéndolo el aceite en el hemos frito antes la cáscara de naranja, junto con el zumo de la naranja y una copita de aguardiente. Todo esto lo echaremos en el lebrillo donde tenemos la harina.
Haremos una masa arropándola después durante una hora.
Sobre la mesa o superficie adecuada espolvoreamos harina y depositaremos la masa para que no se pegue. La extenderemos bien con un rodillo y la iremos cortando en formas de torta muy finas, friéndola en aceite bien caliente y cuando las saquemos les pondremos azúcar.
¡Ahí va eso! 🙂 Por cierto, yo nunca las he visto cubiertas de azúcar, sino con la meloja que se indica en la otra receta.
Si algún días te sientes lo suficientemente valiente como para intentarlo, me cuentas el resultado. Sea el que sea.
Saludos
Miriam Garcia dice
Lo que me gusta de esta masa es que es fermentada, con levadura de pan, aunque aparentemente el resultado se parece a unos pestiños. Muchas gracias!