No sé si el nombre de estos pimientos confitados con cebolla es plenamente correcto; el tema del confitado, los confites y los confits da para mucho, pero sirva decir que se trata de unos pimientos caramelizaditos al extremo junto con cebolla y amenizados con un poco de vinagre y clavo. Fetén.
Una fórmula para aprovechar pimientos de temporada que igual sirve como entrante por sí sola que como plato único acompañado de carne, ave, pescado, legumbres o encima de un buen pan, sin más. Versátil a más no poder.
Haz clic en los apartados del índice para acceder directamente.
Índice
Los pimientos confitados con cebolla y su devenir
- No hay devenir que valga para estos pimientos confitados, ya sabéis que siempre estoy a la busca y captura de formas distintas de servir las verduras para mis vegetarianos particulares. Me he inspirado en una fórmula de Food52, variando alguna cosilla a mi gusto.
- Tienen el punto del vinagre que recuerda a un escabechado, pero también a platos con contrastes agridulces como la deliciosísima caponata siciliana o los suculentos aliños andaluces como el de estas zanahorias. El vinagre da el contrapunto al dulzor de los pimientos y la cebolla.
- Dice el Larousse Cocina de México que confitar es:
Preparar ciertos alimentos para su conservación, cociéndolos lentamente en su grasa, cubriéndolos de azúcar o sumergiéndolos en almíbar (confitería, frutas confitadas) o introduciéndolos en tarros con alcohol (cerezas en aguardiente), en vinagre (alcaparras, pickles, pepinillos) o en una preparación agridulce (chutneys).
- Que hoy día diría que confitar es casi cualquier cosa…
La receta de los pimientos confitados con cebolla
Esta receta tiene poco misterio, salvo la paciencia para caramelizar/tostar todo al punto que más nos guste, pero, oye, que no hay que estar mirando a los ojos a los pimientos y además hoy día con las placas eléctricas no es fácil que prendas fuego a la cocina si te olvidas de ello.
- Pimientos asados troceados que se saltean a fuego alegre con cascos de cebolla y un poco de ajo;
- se desglasa la sartén con vinagre y
- se continúa reduciendo, confitando, el conjunto a fuego bajo hasta el punto deseado de caramelizado.
- Los pimientos asados pueden ser caseros o de conserva.
Vídeo: cómo se hacen los pimientos confitados con cebolla
En 1 minutejo:
La chefa recomienda
Si te apetecen platos de verduras bien gustosos, te ofrezco el imperdible pisto manchego, la sorprendente caponata siciliana, la alboronía andaluza, y el magnífico asadillo manchego. Y, en otro orden de cosas, unos pimientos del piquillo confitados que están para chuparse los dedos hasta de los pies.
También tienes toda mi colección de platos sencillos de la web para echar un vistazo. Dale.
Dudas y consejos sobre los pimientos confitados con cebolla
- — Entonces, ¿puedo usar pimientos asados en conserva?— Sí, claro que puedes, te ahorras trabajo, sin duda. El pelado de los pimientos asados es un poquito pesado.
- —¿Puedo añadir alguna otra verdura?— Sí, claro, como quieras, aunque tiene que ser alguna que también caramelice relativamente bien, por ejemplo, zanahoria, hinojo, chalotas…
- —¿Cuánto dura el confitado en la nevera?— Gracias a la reducción y al vinagre dura por lo menos un par de semanas en perfecto estado. Aunque te reto a que te dure tanto…
La receta de los pimientos confitados con cebolla, escrita
Antes de ponerte manos a la obra:
- lee la receta completa o mira el vídeo,
- asegúrate de que tienes todo lo que necesitas y
- entiende el proceso.
Dificultad: poca.
- 3 pimientos morrones asados
- 1 cebolla grande
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva virgen
- 1 chorretón de vinagre de Jerez
- 3-4 clavos de olor
- Sal al gusto
- Si asas los pimientos en casa, ponlos en una bandeja de horno y ásalos a 180 ºC (con aire) / 200 ºC (sin aire) unos 30-40 minutos, hasta que estén manifiestamente tostados por fuera.
- Sácalos a una cazuela o táper, tápalos y deja que se enfríen del todo; este sudado ayuda a que la piel se desprenda.
- Cuando estén fríos, límpialos de pepitas interiores y de pieles, y trocéalos. Mantenlos sumergidos en el caldito que han soltado.
- Pela y corta una cebolla en cascos. Cubre con aceite de oliva el fondo de una sartén amplia o cazuela y fríe la cebolla a fuego medio, hasta que empiece a dorarse un poco; no hace falta que quede transparente, al revés.
- Agrega entonces los dientes de ajo pelados y laminados, y dales unas vueltas hasta que cambien de color.
- Incorpora los pimientos escurridos de su jugo, mezcla y saltea por lo menos 10 minutos a fuego alto hasta eliminar el líquido que siguen soltando los pimientos, momento en que el conjunto empieza a tostarse y a pegarse un poco a la sartén.
- Cuando todo esté algo tostadito, baja el fuego y desglasa el tostado de la sartén con un chorretón de vinagre a tu gusto, rascando con una espátula si es necesario.
- Sazona con los clavos de olor, tapa el recipiente y confita a fuego mínimo hasta que esté todo muy reducido, por lo menos 30 minutos.
- Cuando el conjunto esté a tu gusto, retira del fuego y sala. Listo.
Referencias
- Onion and red pepper confit. Food52
Colofón
Os dejo que les voy a dar un buen viaje a pimientos confitados con cebolla que me están llamando desde la cocina, no sea que se pongan malos o algo… ejem.
Deja una respuesta