Los quindims del Brasil son un dulce para los entusiastas del coco. No, del que viene cuando los niños son malos, no, del otro. Graciosos.
Cuando tenía 10 años y vivía en el Brasil, más que comer quindims los devoraba. Viví casi dos años con mi familia en Brasil a esa edad (que ya os creíais que me hacía la original con esta receta tan rarita ¿no?).
Era una criança muy golosa y, acostumbrada a la variedad bolleril de los Madriles, la repostería brasileña me pareció en aquel entonces comparativamente pobre, mucho menos variada. Pero en las pastelerías tenían quindims, unos populares pastelillos de yemas y coco, coloridos, pringosos, empalagosísimos y deliciosos, arrellanados en sus capsulitas de papel. Brasil en un bocado.
Y digo quindim de Brasil, porque hay otros de Portugal, que es de donde procede este dulce. Pero en la vieja Europa el quindim se hace con almendra, en lugar de coco. Un mundo de diferencia.
La receta del quindim brasileño
Hacía 1000 años que quería hacer este dulce postre (bien, dejémoslo en 38), incluso tenía recopiladas recetas de quindim con cantidades pantagruélicas (Canal Cocina tiene una receta con 800 g de yemas… ¿en serio?). La receta se inspira en la fórmula del desaparecido blog La Casa sin Tiempo.
Eso sí, si queréis que la superficie del quindim quede brillante hasta que refleje vuestra propia imagen, como manda Iemanjá, tendréis que pincelar los moldes con glucosa líquida. Yo no lo hice por no ir a la farmacia a por la glucosa, pero es lo suyo.
- 5 yemas (las podéis colar para no encontraros la telilla)
- 2 huevos enteros
- 180 g de azúcar (1)
- 1 cucharada de mantequilla pomada
- 100 g de coco rallado deshidratado (2)
- 30 g de agua
- Azúcar y mantequilla adicionales para los moldes
- Se mezcla el coco seco con el agua, para hidratarlo un poco. Veréis que absorbe el agua como un condenado.
- Se mezclan los huevos, yemas y azúcar, y se baten un poco para que se disuelva el azúcar. Se añade el coco, mezclando bien.
- Se deja reposar la mezcla una hora, para que el coco se acabe de hidratar.
- Se enciende el horno a temperatura baja para el baño María (150º es suficiente).
- Se untan los moldes con mantequilla y se espolvorean con azúcar (3). Cuando la mezcla haya reposado, se bate un poco porque el coco tiende a flotar, y se llenan a una altura de un dedo y medio, más o menos.
- Se pone agua a hervir y se colocan los moldes en una bandeja que pueda contener el agua del baño. Si usáis aire en el horno, es preferible tapar los moldecitos con papel de aluminio, pues encuentro que el aire reseca mucho los cuajados. Si no usáis aire, podéis dejar los moldes destapados.
- Se mete la bandeja en el horno y se vierte el agua hirviendo. Se hornean los quindims 35-40 minutos, hasta que estén cuajaditos en el centro.
- Se sacan y se dejan enfriar antes de desmoldar. Se despegan un poco con un cuchillo de las paredes y se pasan a un plato, se desmoldan con bastante facilidad, aunque son delicados; hay que tratarlos con cariño.
(2) Las recetas originales llevan coco fresco, porque en Brasil lo tienen mucho más a mano que aquí. Pero se puede usar coco seco, rehidratándolo.
(3) Los moldes corrientes de flan son perfectos, aunque no hay que llenarlos.
(4) Variaciones: se pueden usar 7 yemas y sustituir las claras por el mismo peso de leche de coco. Hay quien aconseja mezclar previamente el azúcar con el coco hidratado y la mantequilla, y dejar reposar un mínimo de 6 horas. Aunque esto suena bien, no lo he probado y no puedo decir cómo afecta al resultado final.
Sí, estos quindims son una bomba calórica, con todo su coco, sus yemas, su camisita y su canesú. Pero hay que darse algún gusto de vez en cuando, no todo va a ser que nos hagan la puñeta en la vida.
Y si os gustan los flanes sencillos, sin coco ni nada, aquí tenéis la receta del flan de huevo tradicional. Que siempre hay algún tiquis miquis.
Para quien ama la lisonja, es enemigo quien no es adulador. Padre Feijóo.
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Maravilloso y seguro riquisima! M ha encantado!!
Pues vaya tentación, con lo quie me gusta el coco y la pinta tan irresitible que tienen…
Un besico.
Te salieron buenisimos! Y ojo, que hablo con conocimiento de causa! Esto también se come en Argentina, asi de dulce…pero ademas le agregamos una cucharita de dulce de leche, por si nos faltaba algo para poner a riesgo nuestra glucemia!! ja ja
Hermosa foto también…(me fascinan las copitas!)
Anda, pues no sabía que en Argentina también los comíais… madre mía, con dulce de leche ya debe ser para morir! XD
Ufff, con este no puedo, esa bomba de azúcar podría matarme, jajajaja…
Parece que esta receta está hecha para mi, ¡que soy una fanática del coco!
Pues entonces te encantarán!! Seguro!
Te ha quedado unas fotos con unos colores super chulos! por no decir nada del sabor que deben tener esos qudins…
Un beso
Gracias! Me costó mucho apartarme de mis oscuros colores habituales…
Qué pinta tan rica y qué tentación para las que nos gusta el coco…
Las fotos, como siempre, fantásticas.
Abrazos.
Ai menina ¡¡¡¡ ainda melhor se vc troca o coco com manga, uma delicia¡¡¡¡¡¡
Bem-vindo 😉 Gracias por la sugerencia!
Asi viviste en el Brasil de pequeña?
Nani de La Cuina Violeta también, y a menudo prepara platos exoticos como este postre tuyo.
No me va mucho ninguno de los dos cocos, pero con estos platos y presentación, seguro que me los comía!
Te han quedado fantásticos!!! y que sabor tan dulce y especial deben tener… UNA DELÍCIA PARA EL PALADAR 🙂
O-o. Coco y yemas!!. Para morirse de rico tiene que estar! Apuntada queda 🙂
Que maravilla de postre, eso sí, extraordinariamente calórico, aunque de vez en cuando, hay que darle una alegría al cuerpo y a la mente. Hace un montón de tiempo que no venía por aquí ya que cuando cambiaste de página, o no la copie bien o algo paso porque no se actualizó y como siempre voy con prisas pues no me había dado cuenta y cuando pensaba en que tenía que mirarlo, pues no era el momento, en fin. Pero ahora que estoy revisando blogs para no perder ninguno con la desaparición de reader, voy a enlazarlo correctamente y a ponerme al día de todo lo que has publicado, que será mucho, pero con el fin de semana por delante en un plis plas me pongo al día.
Un abrazo!
Qué bien verte de nuevo por aquí, Pilar!
Hola….quisiera hacer este quindin….. pero.. después de que esta frío y desmoldado… se tiene que meter en la nevera????? Es mejor hacerlo de un día para otro ????
Se puede consumir después del desmoldado, pero si quieres guardarlos, los dulces que llevan huevo siempre hay que conservarlos en nevera, además así se ponen más firmes. No hay necesidad de hacerlos de un día para otro.
Me encanta! vaya pinta tienen!! habrá que probarlos!
adoro quindims!!! Pero es mucho mas sabroso y jugoso, con coco fresco.Da más trabajo, pero vale la pena.
Huy, sí, estoy segura. Prometo hacerte caso y probarlos con coco fresco 😉
me encantan yo tenia la receta pero no la cantidad de ingredientes, voy a
probar a hacerlos, luego les cuento.
Hola, te quería hacer una consulta, el horno fuerte, medio o bajo? Gracias!
Hola, en el punto 4 de la receta te digo la temperatura: «Se enciende el horno a temperatura baja para el baño María (150ºC es suficiente)»
Hola.Estoy provando tu receta, despues te digo como me quedado , los tullos se vem exquisitos!!!!!
Espero que te gusten ;).