¿Ojipláticos? ¿Pensáis que me tomo demasiado en serio lo de comer sano después de los atracones navideños? Estas hamburguesas de legumbres son tan fetén que os harán olvidar que son asquerosamente saludables. Tienen el mismo salero que un buen falafel; los forofos de los falafel sabréis qué quiero decir.
Las hamburguesas de legumbres son una forma imaginativa y salerosa de comer legumbres y verduras con permiso para fagocitarlas en bocata. Facilísimas de hacer y completamente personalizables con semillas, especias y tropezones de verduritas, ea. Y si tenemos suerte, hasta se las colamos a los churumbeles.
Que quede claro que estas hamburguesas solo se parecen a las de carne en el nombre. No se trata de sustituir a una hamburguesa de carne, porque los sabores y texturas no son ni parecidos, sino de comer legumbres y verduras de una manera divertida y muy apetecible, e introducir un poco de color en la insipidez de nuestras vidas, ejem.
Disección de las hamburguesas de legumbres
¿Qué ingredientes podemos poner en las hamburguesas de legumbres? Pues los siguientes:
- Una base de una legumbre triturada, normalmente ya cocida, con la salvedad de los garbanzos, que pueden ir sencillamente remojados igual que en los falafel y dan muy buen resultado. Mola más que la legumbre no quede triturada por completo, sino que tenga algún trozo sin triturar para darle más textura. Garbanzos y alubias de todo porte dan buen resultado; se usan también lentejas, aunque yo no tengo la experiencia de hacer las hamburguesas con lentejas.
- Huevo o yema para cohesionar, especialmente al freír la hamburguesa o pasarla por la plancha. En lugar de huevo los veganos usan tahini, por ejemplo, esa pasta de sésamo típica del Levante mediterráneo. La diferencia con el huevo es que este coagula con el calor dando más cohesión a la hamburguesa y el tahini, no. Pero bueno, tampoco es imprescindible.
- Pan rallado o harina para hacer más sólida la mezcla; según la legumbre y si es de conserva o cocida en casa, la mezcla de hamburguesa quedará más o menos seca y blanda. Lo normal es tener que añadir algo de pan rallado para que sea más manejable y se puedan modelar bien las tortitas. Una idea: igualmente se puede usar harina de garbanzo para este menester y además aumentamos la proporción de legumbre.
- Semillas crudas al gusto, como por ejemplo sésamo, pipas de calabaza, pipas de girasol, etc.
- Cereales o pseudocereales cocidos, como arroz (queda mejor integral), quinoa, etc.
- Cualquier verdura fresca o rehogada que nos apetezca, desde cebolla picadita y ajo majado, el clásico acompañamiento de una hamburguesa de carne, a restos de verduras como acelgas, espinacas, puerros, etc., bien picaditas.
- Especias y hierbajos: aquí nos podemos volver locos y darle a nuestra hamburguesa el aire que queramos. Desde un aire oriental con cilantro fresco, comino y sésamo, hasta mejicanizarla con jalapeños picaditos y coriandro molido, pasando por curry en polvo, pimentón picante o dulce… lo que se nos ocurra. Encuentro que hay que ser generosos con las especias y condimentos, de lo contrario la mezcla de la hamburguesa resulta un poco sosa, en mi opinión.
- Otras ideas para aditamentos: maíz en grano, setas picadas, tomates secos, encurtidos,… dad rienda suelta a vuestra imaginación. Que sí, que todos tenemos de eso.
Si os estáis preguntando si estas hamburguesas de legumbres son veganas, lo serán si no usáis huevo. Vegetarianas lo son sin ninguna duda.
Y si además nos comemos estas hamburguesas de legumbres en un buen pan de hamburguesa casero… ganaremos un minipunto y 10 gallifantes.
- 400-500 g de legumbres cocidas, judías rojas en este caso (1)
- Media cebolleta picada (puede ser cebolla igualmente)
- Comino, pimienta de Jamaica y chiles majados, al gusto
- 1 yema
- 2 cdas. de pan rallado
- Sal al gusto
- Aceite de oliva para freír
- Picamos la cebolleta. Reservamos.
- Majamos las especias, no hace falta que queden muy molidas.
- Ponemos en una batidora o robot las legumbres bien escurridas de su líquido con la cebolleta, las especias y algo de sal, y trituramos groseramente. Mejor no pasarnos y que quede algo de textura.
- Agregamos la yema y mezclamos.
- Añadimos primero una cda. del pan rallado y mezclamos. Comprobamos si la masa se puede manejar cómodamente; apenas debe pegarse a los dedos. Añadiremos más pan rallado si es necesario.
- Cuando la masa tenga la consistencia deseada la dividimos en cuatro porciones iguales y las moldeamos en forma de hamburguesa (o en ocho porciones si hacemos minihamburguesas).
- Si las vamos a consumir de inmediato pincelamos una sartén o una plancha con aceite de oliva, calentamos a fuego medio alto y cocinamos las hamburguesas. Si os gusta, también se pueden rebozar en pan rallado antes de cocinarlas.
- Si no las vamos a consumir en el momento las guardamos en bolsas herméticas de plástico, intentando quitarles todo el aire posible y separándolas entre sí con un papelito, un día como máximo en la nevera si hemos usado la yema. Si no la hemos puesto se pueden conservar un par de días más. En cualquier caso tienen que estar muy bien tapadas porque se resecan con facilidad.
Las hamburguesitas se pueden congelar bien envueltas en plástico. Os lo digo por si os sobra un cargamento de legumbres cocidas y tenéis ganas de jarana. Y dan muy buen resultado en formato mini, para aperitivo.
Un aviso para navegantes: la consistencia de una hamburguesa de legumbres no es ni de lejos tan sólida como la de una hamburguesa de carne, por lo que tiende a aplastarse más cuando la mordemos junto con el pan. Tenedlo en cuenta si usáis un pan un poco firme en lugar de un bollo blandito de hamburguesa. Cuanto más blandito sea el bollo, menos se desbaratará la hamburguesa.
Hala, ya he tranquilizado mi conciencia después de publicar toneladas de dulces en la temporada de prenavidad. Que sí, que yo tengo conciencia, que sé lo que estáis pensando. Animarse a hacer estas hamburguesas de legumbres, os sorprenderán.
Carmen dice
Tienen que estar deliciosas! yo en casa hago bastante las de faláfel, hago masa de faláfel y le doy forma de hamburguesa, y nos encanta, y el bollo blandito lo hago con pan Challah, así no se deshacen al comerlas.
Es buena forma de dar legumbres a los niños, aunque se les de en guisos, así les resultan más divertidas
Un saludo!
Miriam Garcia dice
Besos!
Patricia dice
Sin duda unas hamburguesas que tienen que estar riquísimas, y encima muy sanotas. Tomo buena nota de ellas, porque nos encantan las hamburguesas en casa y estas seguro que triunfan!
Miriam Garcia dice
Pero ten en cuenta que no tienen nada que ver con las de carne, no vaya a ser que esperéis otra cosa ;). Besos.
alina lopez ochoa dice
Miriam: un abrazo y el deseo de salud para tí y los tuyos por la llegada de año nuevo…carga de trabajo impidió comunicarme antes contigo…gracias por los regalos que siempre envías, son adorables…
Miriam Garcia dice
Gracias a ti por leerme ;).
Estorbin dice
Me lo anoto, aunque no se si colará por aquí, igual las hago mini a modo de experimento a ver si les mola. Por cierto, ¿valen los botes de garbanzos y alubias ya cocidos? Por empezar probando con eso. Post estupendo como siempre, un abrazo
Miriam Garcia dice
Sí, valen perfectamente. Las legumbres en conserva dan algo menos de firmeza que las cocidas en casa, pero no hay problema ;). Besos.
Ester dice
Me ha encantado la receta. Una receta perfecta de bienvenida! Gracias. Te sigo!!
Miriam Garcia dice
Gracias a ti ;).
Eva dice
Me encanta todo lo que nos enseñas , gracias por ser tam compartida.
Miriam Garcia dice
Gracias a ti, Eva. Un abrazo.
El Caldero de Nimue dice
Me encantan las hamburguesas de legumbres, sobre todo las de alubias. ¡Y qué pinta tienen estas!
Miriam Garcia dice
😉
Irene dice
Están fantásticas, que yo he probado el falafel y me encanta.
Una idea para los veganos: una amiga vegana me ha enseñado a usar un sustituto de huevo empleando 1 cucharada de linaza remojada en 3 cucharadas de agua, por cada huevo. Ya remojada se licúa (o puede emplearse linaza molida en seco si la encuentras). Esta preparación hará una mezcla gelatinosa que sustituye perfectamente al huevo.
Por cierto, soy de Guatemala y veo que utilizas nuestro delicioso chile de Cobán. Exquisito pero ay! que si padeces de gastritis no puedes ni olerlo. Yo por ejemplo… extraño comerlo.
Un abrazo, me encantan tus recetas.
Irene.
Miriam Garcia dice
Muchas gracias por la idea, Irene! Y lo de los chiles de Cobán es porque me los regaló un amigo guatemalteco ;). Un abrazo transoceánico.
Laura dice
Una deliciosa variante a las de carne… me gustan incluso más! Me quedaron estupendas con tu ayuda… y son muy fáciles de hacer.
Sano y delicioso manjar. Un beso!
Miriam Garcia dice
Me alegro de que te gustaran, un abrazo 😉
Dolores dice
Hola. He hecho esta receta varias veces ¡y es genial! Había probado otras antes pero me encontraba con el inconveniente de que al ponerlas en la plancha se deformaban al tratar de darles la vuelta, sin embargo estas para nada, no se deforman con una textura que no es para nada dura o seca ¡Todo lo contrario! 🙂
Me gusta hacerla con lentejas naranjas, aunque luego pierden el color y no quedan nada fashion 😉
Felicidades
Miriam Garcia dice
Sí, son estupendas, otra gran idea para comer legumbres ;). Gracias por venir a contármelo.
Carmen dice
¡Hola!
Veo que para cohesionar usas yema de huevo ¿has probado con clara? Es por usar alguna, además son más fáciles de encontrar en los refrigerados del súper, ya sabes, las botellitas de claras de huevo altamente proteínicas, etc.
Gracias por tus recetas
Miriam Garcia dice
Mmm, no, no he probado, la consistencia que da la clara sola es distinta, más gelatinosa, por qué necesitas usar claras envasadas en lugar de huevos sin más? Además, puedes emplear el huevo entero.