La propuesta del HEMC de este mes, auspiciado por La Mambalina, es hacer un postre con té. Sabéis que no soy forofa del té, al menos no en infusión. Pero nunca es tarde para encontrar otros métodos o presentaciones en los que me pueda gustar este hierbajo. Y llevaba ya mucho tiempo viendo recetas con un tal té matcha por la blogosfera, donde cantaban sus alabanzas sin cesar. Qué empacho de té matcha, por favor. Así que, por una vez, decidí no resistirme y unirme a los acólitos del té matcha…
El té matcha fetén cuesta un ojito de la cara, por si no lo sabíais. Bien es cierto que para hacer dulces no hace falta una gran cantidad, cunde bastante. De modo que dispúseme a gastarme unos dineros en el ubicuo té matcha… hay que ver a donde nos llevan nuestros caprichos culinarios. Lo pedí por Internet en esta web, recomendada por los señores de Gastronomía y Cía. La presentación es en forma de polvo de color verde, un color precioso por cierto, y para la infusión se echa una cucharadita o dos en agua muy caliente, nunca hirviendo, y se agita bien hasta sacarle espuma. No se filtra ni nada. El resultado es una suspensión de polvillo verde con un aspecto harto sospechoso. El día que me llegó el té me propuse ser valiente y arrojada y probar tal brebaje. Desgraciadamente, no modificó mi opinión sobre el té ni un ápice. La infusión se parecía sospechosamente a una tacita de légamo o cieno de la charca más cercana. Pero aún me quedaba el dulce que tenía que preparar para seguir intentando comulgar con el té… de las narices. ¿Qué me pasa a mí con el té que siempre le doy otra oportunidad? Ni que fuera un antiguo novio.
Me decidí por una ligera tartita de mousse. La haría con una base de bizcocho, una capa de mousse de mascarpone y una segunda capa de mousse de té matcha. Las ideas y las recetas están sacadas de esta web y de esta.
- Para el bizcocho de té matcha de Nordljus:
- 10 g de té matcha
- 50 g de harina
- 2 yemas
- 2 claras
- 60 g de azúcar
- Para la mousse de mascarpone adaptada de Eddy Van Damme:
- 3 hojas de gelatina
- 180 g de nata líquida
- 4 yemas
- 60 g de agua
- 90 g de azúcar
- 250 g de queso mascarpone (1)
- Para la mousse de té matcha adaptada de Nordljus:
- 3 hojas de gelatina
- 100 g de leche
- 10 g de té matcha
- 1 yema
- 1 clara
- 40 g de azúcar
- 100 ml de nata líquida
- Se precalienta el horno a 170 ºC.
- Se pesan la harina y el té, se mezclan y se tamizan. Se reservan.
- Se mezclan las yemas con la mitad del azúcar y se montan hasta que blanqueen.
- Se hace un merengue con las claras y el resto del azúcar.
- Se mezcla el montado de yemas con el merengue en varias dosis, removiendo con delicadeza. Una vez bien mezclado todo, se añade la harina con el té, también poco a poco y removiendo delicadamente para que no se baje el merengue ni las yemas.
- Se vierte la mezcla homogeneizada en un molde desmontable (yo le puse una base de papel de hornear untado de mantequilla y harina para asegurarme de que no se pegaba el fondo) y se hornea unos 12 minutos. Con un molde de 20 cm sale un bizcocho de algo más de un dedo de alto. Una vez horneado, se saca del molde con cuidado y se deja enfriar en una rejilla.
- En primer lugar se ponen las hojas de gelatina en un cuenco con agua fría.
- Si tenéis Thermomix 21, se ponen las yemas en el vaso con el azúcar y el agua, y se baten con la mariposa a velocidad 1½, unos 8 minutos a 80 ºC. Yo tengo un termómetro de roast-beef con el que mido hasta que se han alcanzado de verdad los 80 ºC, porque el tiempo puede variar en función del tamaño de los huevos y de la temperatura de vuestro frigo. Si no tenéis Thermomix, pues estas natillas se hacen sobre un cazo con agua hirviendo, al baño maría, hasta alcanzar la temperatura indicada. En este punto se escurren las hojas de gelatina, se añaden a las natillas calientes, se deshacen bien y se deja enfriar el conjunto.
- Se monta la nata. Según la receta, es importante que no se monte la nata dura, sino solamente hasta que haga picos suaves.
- Cuando las natillas están a temperatura ambiente, se mezclan con el mascarpone. Se pueden batir si es necesario para que el mascarpone se deshaga del todo. A continuación se incorpora la nata con movimientos suaves, para que esta no se baje.
- Se ponen las hojas de gelatina en un cuenco con agua fría.
- Se vierte la leche en un cazo, se añade el té, se bate un poco para que se mezcle y se pone a calentar.
- Se monta la yema con la mitad del azúcar. Se añade a continuación la infusión de leche y té, y se calienta el conjunto a 85 ºC para hacer unas natillas. Se mide la temperatura, como en la anterior mousse. Se añade la gelatina bien escurrida y se deja enfriar el conjunto.
- Se monta la nata al igual que en la anterior mousse, y se reserva.
- Se hace un merengue con la clara y el resto del azúcar.
- Cuando las natillas están frías, se mezcla la nata con movimientos suaves y envolventes. A continuación se hace lo mismo con el merengue.
- Atención, porque aquí hay que planificarse. Una vez hecho el bizcocho y cuando ya está frío, yo lo congelé para cortarlo. La superficie donde descansará la primera mousse queda con cierta joroba, como en cualquier bizcocho de pro, por lo que hay que recortarla un poquito en horizontal con un cuchillo grande. Me pareció más fácil hacerlo con el bizcocho congelado.
- Una vez listo el bizcocho para montar, usé un aro para tartas ajustable, que es la bomba. Lo ajustas bien alrededor del bizcochito, puesto sobre algún molde bajo o una bandeja pequeña, y se vierte la mousse de mascarpone cuando esté preparada. Si no tenéis un aro ajustable, se podrá hacer con un molde desmontable bien aceitadito por los lados, pero hay que tener en cuenta una cosa: el bizcocho hay que hacerlo en un molde un poco más grande, porque al enfriarse mengua una pizca en diámetro. De modo que si pusierais el bizcocho y las mousses en el mismo molde, la mousse bañaría el exterior del bizcocho y este no se vería en el resultado final. Si se hace el bizcocho con un molde un pelín más grande que el que se use para el montaje final de la tarta, lo más que puede pasar es que haya que recortarlo un poco.
- En cuanto a la mousse de mascarpone, la cantidad de la receta es mayor que la que se necesita para una tarta de dos capas, así que con el sobrante rellené un molde de bombones con forma de conchitas para ponerlas de adorno en la tarta acabada. Las formitas se congelan y se desmoldan muy bien. Aún me sobró una pizca de mousse. Una vez escudillada, como dicen los profesionales, la mousse de mascarpone sobre el bizcocho, hay que esperar a que cuaje para poner la siguiente capa. Se puede meter tranquilamente al congelador y mientras tanto se hace la mousse verde. Para cuando esté hecha la mousse de té, ya estará cuajada la mousse de queso; entonces se extiende la mousse de té. Una observación: la diferencia que hay en cuanto a elaboración entre la mousse de té y la de mascarpone es que la de té lleva el merengue para darle aún más esponjosidad. Francamente, yo no noté mucha diferencia entre la cremosidad de ambas en el resultado final y, sin embargo, el añadido del merengue hace que la mousse de té sea mucho más difícil de manejar y de homogeneizar. Creo que, aunque la receta no dice nada, no se debe hacer un merengue duro, sino uno suave para que la mousse fluya al escudillarla. La mousse de queso fluyó de maravilla al verterla y dejó una preciosa capa uniforme que llenó perfectamente las irregularidades del bizcocho. Sin embargo, la mousse de té no fluía y, no solo quedaron huecos entre ella y la capa inferior, sino que la superficie quedó hecha un asco. La próxima vez lo haré bien y no montaré el merengue a tope.
- Una vez vertida la mousse de té, se puede meter al congelador otra vez, así es muy fácil quitarle la pared del molde desmontable o del aro, en mi caso. Yo monté la tarta con un día de antelación y la dejé toda la noche en el congelador. Como a mí me había quedado tan fea la superficie, tuve que hacer diversos apaños al día siguiente. Me dije: no importa, haces una bonita gelatina y le pones una capa finita para que se vea una superficie lisa. Y así lo hice, pero fui tan lista que le puse la gelatina y la metí de nuevo al congelador... para quien no lo sepa, como yo, esto no funciona. La maldita gelatina cristaliza en una superficie irregular y mate, justo lo contrario de lo que yo buscaba. Peaso de inútil. Pero no me dejé arredrar por tamaño contratiempo. Había yo recogido cual hormiguita industriosa los restos del bizcocho que había recortado el día anterior y, como se habían resecado, decidí pulverizarlos y hacer un lindo polvillo verde para espolvorear y disimular la horrible gelatina. De modo que encima de la gelatina puse las monísimas conchas y entre las conchitas espolvoreé con cuidado el bizcocho triturado... he visto tartas más feas. Mis hijos me dijeron que debía haber puesto un Bob Esponja en el centro... En fin, que la capa de encima quedó bastante desastrosa, la mousse verde muy irregular por los lados de la tarta y además la gelatina se filtró por muchos puntos, con lo que por los lados de la tarta, como se ve en las fotos, la capa verde queda fea de narices. Qué le vamos a hacer.
Pasemos al resultado gustativo: debo admitir que en este caso el sabor del té resultaba delicioso; la tarta es suavísima, ligera y con un sutil sabor a té que ni molesta ni avasalla. Tampoco el sabor del mascarpone, que combina estupendamente con el resto. Un hallazgo de tarta, sin duda la repetiré, pero sin las numerosas meteduras de pata que ya he comentado.
Si os gusta esto del té matcha, aquí tenéis otras recetas con té matcha o incluso té verde:
Y otra tartita con mascarpone, tarta helada de mascarpone con frutas rojas.
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Akane dice
Ais Miriam, me sabe mal que tengas tan mala relación con el té, y eso que le das tantas oportunidades… quizá existe el té perfecto para tí, espero que algún día lo encuentres y hagas las paces con él 🙂
A mi al principio no me gustaba mucho, pero al descubrir las enormes variedades que hay, y las distintas formas de prepararlo, servirlo y acompañarlo… al final he encontrado mis tés favoritos y me encanta prepararlo en casa.
Sabía que el matcha es carísimo, y no lo encuentro por aquí, porque como dices se usa tanto en repostería que me apetece probarlo.
Tu tarta tiene una presencia magnífica y es sin duda un postre muy original. Es muy bonita y seguro que riquísima.
Un abrazo
Curra dice
A mi me encanta el té y éste té verde marcha lo prové una vez en una "ceremonia del te" ala que asistí y participé.
El mascapone me gusta mucho también, con lo que uniendo los dos ingredienes y lo espectacular que te ha quedado, creo que me llevo la receta con tu permiso.
Suerte mi niña.
Un abrazo y feliz domingo.
Carlos Dube dice
Pues los errores que comentas sólo me inspiran indulgencia porque entre otras cosas el resultado me parece maravilloso. Qué rico este pastel, y además con el aliciente de tener el té matcha, que también tengo curiosidad por probarlo. No sé, creo que cuando lo repitas, porque me creo a pies juntillas que tenía que ser suave y buenísima, te voy a dar nuestra dirección ;).
Un saludo.
Isa dice
no conocia tu blog, pero me gusta y me quedo ,con tu permiso claro¡¡
un saludo
Begoña dice
La tarta te ha quedado espectacular!!!
A mi tampoco me gusta el té y me ha costado mucho encontrar una receta para el evento de este mes.
Yo he usado un te verde con violeta, y la verdad es que ha resultado muy rico.
El bizcocho de té tiene muy buena pinta y ya sabiendo que a ti te gusta, tenemos una garantía de éxito…
Un saludo, Begoña
Núria dice
Vaya entrada más guapa, te lo has trabajado eh???desconozco el mundo de los tes, he probado alguno pero todavía he encontrado el mío.
La tart genial…me pido un trozo para merendar.
besos
Marta dice
Me has dejado impresionada con esta tarta, te ha quedado de lujo!
Los postres con té verde me encantan y sobre todo desde que empecé a probar alguna mousse japonesa de té, son tan ricas!
Besos
ANA dice
Espectacular el resultado. Yo también he participado en el evento de este mes, espero encontrar muchas ideas.
Besos!
Ana de: 5 sentidos en la cocina
MªJose-Dit i Fet dice
Vaya pasada de tarta!!! menos mal que no te gusta el te si te llega a gustar no se que hubieras preparado…un besitoooo
Su dice
Tiene pinta de tarta de pastelería, casi como un tiramisú a la japonesa. ¡Tiene que estar delicioso!
Pilar - Lechuza dice
Bueno, despues de tus aventuras con el té matcha y la tartita, veo que el resultado ha sido espectacular!!! A mí me gusta que tengan imperfecciones, señal de que está hecha por un ser humano y no por una máquina de hacer tartas, que al igual que las meigas "habelas hainas".
Yo soy aficionada a las infusiones en general, me gustan las frutales pero el té verde lo probé una vez y me pareció excesivamente fuerte.Todo será probarlo camuflado en esta tarta!!
un biquiño
La cuina vermella dice
Anda ya, no es fea de narices ni le falta un bob esponja… (pero que risa me ha entrado al leerlo), yo la veo preciosa de verdad si hasta los del foodgwker lo ven así!!!
Que manos tienes Miriam, como luce todo lo que cocinas. Un beso.
Ajonjoli dice
pero ¿qué dices? ¡¡si te ha quedado genial la tarta!! lo del té matcha yo andaba pensando si darle una oportunidad, pero me fastidia que sea tan caro y que pienso que no le daré mucho uso, así que el postre que preparé lo hice con té verde normal. Pero si tú dices que queda tan buena….no sé, igual me lo pienso otra vez.
un beso.
Su dice
Un placer!! Es realmente espectacular y a través de tus fotos intuyo lo rica que debe estar…
Mil gracias
TROTAMUNDOS dice
Pues todo lo que describes de fatídico te puedo decir que en las fotos no se aprecia nada de nada, sino todo lo contrario, se ve una tarta espléndida y con un colorido precioso.
Este tipo de tartas frías me encantan, las encuentro tan fáciles de hacer, y gustan tanto a todos que en casa siempre triunfan..
Yo soy de té, no todos los días como un reloj, pero sí con mucha asiduidad, pero con el té marcha siempre pienso que hay una fiebre o algo así, jajaj lo encuentro un poco insulso …, pero eso sí, el color en los postres es insuperable…
Un besote guapa.
Kako dice
Y yo que soy una fanática del té pero sin ideas para preparar algo. Te ha quedado hermoso, te felicito, da pena partirlo.
Un beso
Maite (Mai) dice
Mira! es maravillosa! Claro, tu que la tienes cerca y la examinas con lupa a la pobre pues claro… al microscopio todos salimos feos:-) Tienes un toque maravilloso, de verdad y eres muy injusta con esta pobre tarta que no será perfecta, pero si preciosa!
Besos!
Bea la cocinillas dice
Nada, yo sólo venía a presentarme y decirte que he descubierto tu blog vía Maite (Hierbas y especias) y ya me he paseado un ratito por aquí….me encanta! Ese pan de centeno….en cuanto encuentre la harina, me lo preparo. Te sigo!
PD: Yo tampoco soy de tes, pero la tarta te ha quedado preciosa!
epa! dice
Miriam, qué pasada de tarta, y qué pasada el post! A mí me encanta esto de que te cuenten el proceso, las dificultades y la manera de resolverlas. Tiene una pinta…
El té matcha no lo he probado, lástima que sea tan caro como decís.
B*
Simplemente cocinera dice
ES-PEC-TA-CU-LAR!!! Que màs te puedo decir? Me parece una maravilla y como no he probado el tè matcha aùn, del que he sentido hablar (debo conseguirlo!) me deja super curiosa del sabor. Ademàs los mousses…hummmm…. este es el tipo de torta que me encanta.
Un besito guapa!Sil
anta dice
¡Pobrecilla la tarta! ¡Y tú qué exigente! Mira que decir que es fea. Yo la probaría incluso a estas horas de la madrugada. Y eso que el te matcha no lo he visto nunca. Lleva mascarpone, al que me estoy haciendo adicta últimamente.
Nada, nada, que la intentaré.
Besos.
Esperanza.
Maduixa dice
Miriam, cielo, pues opino como todo el mundo. Me parece que te ha quedado preciosa, muy elegante, y te creo cuando dices que es suave y deliciosa. Aunque me pase como a ti y me haya empachado de té matcha sin haberlo probado nunca :-)…y eso que la infusión de té, con limón, siempre me ha gustado.
Me fio totalmente de tu criterio y lo probaré :-). Algún día tendrá que ser el primero y habrá que dejarse llevar un poco por las modas, no? 🙂
un beso, guapa 🙂
PILAR dice
Madre mío, que odisea con la tarta. Pero el resultado final bien merece la pena. Ha quedado estupenda y el sabor debe se para relamerse. Yo al principio no comulgaba mucho con el te pero ahora soy una auténtica forofa.
Besos!
Marina dice
Ummmmm, mereció la pena saltarse la dieta por una tarta así. Normalmente, uno piensa que en las fotos la comida sale más bonita, pero esta tarta, era más bonita en la realidad si cabe.
besiños
Marina
Miriam dice
Sra. Akane: gracias por tus buenos deseos…
Sra. Curra: gracias!
Sr. Carlos: jiji.
Sra. Isa: pasa y tómate algo!
Sra. Begoña: la vi, una pasada!
Sra. Núria: me apetecía hacer una petardez, jiji.
Sra. Marta: pues yo nunca había probado esta mousse y me ha gustado!
Sra. Ana: seguro que sí!
Sra. Mª José: gracias!
Sra. Su: pues algo así!
Sra. Lechuza: pues aquí el sabor es suave, depende de la cantidad que le eches, claro.
Sres. Cuiners: gracias!
Sra. Ajonjolí: queda bastante bien, fíjate que a mí el té ni fu ni fa, y me gustó.
Sra. Su: gracias!
Sra. Trota: sí, son relativamente fáciles y muy agradecidas, la verdad. Besos.
Sra. Kako: pues no quedó nada!
Sra. Mai: gracias!
Sra. Bea: ooooh, ponte cómoda, jaja.
Sra. Epa: es que los profesionales hay un zurrón de cosas que no te cuentan! Y luego te las encuentras por el camino…
Sra. Cocinera: gracias!
Sra. Anta: sí, qué rico el mascarpone… por favorrrr!!!
Sra. Maduixa: pues sí… te aseguro que en los EE. UU. debe estar super de moda el tecito de las narices.
Sra. Pilar: oooh, entonces esta tarta tiene que gustarte, sin duda.
Sra. Marina: jiji, no quedó nada, buitres!
Miriam dice
Y se me olvidó decir que mis hijos bautizaron esta tarta como la de moco alienígena…
locasita dice
Pues vaya pinta! tiene que estar muy buena…. he descubierto tu blog y me quedo por aquí. Pásate por el mío si quieres! Un beso!
http://amimegustacomer.blogspot.com
silvia dice
Te felicito,es espectacular.Tiene un corte sublime ,))
Un saludo
Miriam dice
Gracias, Locasita, no dudes de que me pasaré! Aunque ya se me amontona el trabajo… 😛
lamambalina dice
Una tarta realmente espectacular miriam! muchas gracias por esta aportación me encanta! te han salido tan bien, y las fotos realmente espectaculares, espero algún dia conseguir una cámara como la tuya hacer garndes cosas con ella!
muchas gracias de verdad!
lamambalina
Cociña Poética dice
Impresionante , sólo te digo que será mi tarta de aniversario , es un espectáculo de receta , te ha quedado genial .
Bicos
Miriam dice
Sra. Mambalina: gracias a ti!
Sra. Cociña Poética: oooh, qué responsabilidad! Gracias.
Drunae dice
Por favor no podeis poner alguna recetita de pasteles facil? Me esta entrando un complejo que tendre que hacer terapia, pero que pasteles madre mia, como voy a lograr hacer algo asi. Hay que complejo, por favor, por favor algo facilito
Drunae
pepekitchen dice
Bueno, llego tarde a ver tu maravillosa tarta, pero me ha encantado, y tu sinceridad y honestidad contando los pequeños "contratiempos" que todos tenemos que afrontar en la cocina, y encima con buen humor 🙂
Ahora me he quedado acomplejado, qué hago yo con el matcha para estar a la altura jeje…
Un abrazo y gracias por inspirarnos.
Paco Perez dice
uno va descubriendo cosas por aqui y por alla…..
En facebook tienes tu perfil con una camara y como me gusta la fotografia,vine a ver quien eras….. esperaba encontrar un blog de fotografia, para ser sincero.
… tambien me gusta la cocina, porsupuesto. Me parece muy interesante leerte y encuentro tu blog muy bien estructurado. Me gusta la manera como haces referencia a loa autores de los platillos originales o las historias y notas que haces al respecto, asi como las fotografias, claro.
En fin , todo en general muy bonito poraqui. Rico el pastel de te verde y muy buena presentacion tambien !!
Felicidades !!
Saludos coordiales.
Paco Perez,
Montreal, Qc. Canada
wendy dice
Hola Miriam;Que pinta mas buena tiene esta tarta, pero yo quería hacer los pastelitos de matcha y corazón de japón; mi pregunta es:¿Qué tipo de matcha?. Soy una forofa del té matcha. Gracias de antemano y Besitos
Ana dice
Hola Miriam. A mí me parece que es una tarta bien bonita. Y la voy a hacer para un cumpleaños. La semana que viene!!! Con que antelación es conveniente sacarla del congelador? Muchas gracias y enhorabuena por este magnífico blog al que estoy enganchada….Un abrazo
Miriam Garcia dice
Mmm, con que la saques del congelador un par de horas antes es suficiente, a no ser que tengas 40º en tu cocina ;). Que te salga bien la tarta y gracias por la visita!!
Ana dice
Muchísimas gracias Miriam !!!!!!