Noooo, estas galletas calabaza no llevan calabaza, solo tienen la forma de calabaza. Es cómodo usar un divertido cortador para preparar algo relativo a Halloween, a mis hijos aún les hace algo de gracia. Poca, más bien. ¿Será que las hago por mí? Se ve que tenía el día moñas.
Estas galletas se hacen con una masa estándar de mantequilla para galletas decoradas, sin montar la mantequilla y sin levadura, para que no se deforme el relieve en la cocción; la masa no debe crecer apenas en el horno. La receta de la masa de galletas que he utilizado procede de Postreadicción.
He hecho estas galletas de la forma más sencilla posible, pero se puede uno poner tan imaginativo como quiera, podemos desde añadirles colorante naranja hasta rellenar los ojos y demás bajorrelieves con chocolate o glasa negra. Eso lo dejo a vuestro libre albedrío, que ya tenéis edad, ea.
Lo que necesitamos para hacer las galletas calabaza
- Un cernidor para airear la harina
- Un robot de cocina con pala o unas varillas eléctricas
- Un rodillo
- Papel de hornear (yo uso el de la marca Albal, es excelente)
- Un cortador de calabaza (en la tienda María Lunarillos, por ejemplo)
- Cuencos, tenedores y cosas que tenemos todos en la cocina
- 250 g de mantequilla ablandada
- 175 g de azúcar glas
- Una cdta. de extracto de vainilla
- Un huevo mediano y una yema
- 550 g de harina de repostería
- Un pellizco de sal
- Tamizamos la harina de repostería con la sal. Reservamos.
- Ponemos en un bol la mantequilla ablandada con el azúcar glas. Batimos la mantequilla con el azúcar glas solo para que se mezclen, a velocidad mínima, con un robot o con varillas eléctricas.
- Batimos muy ligeramente el huevo y la yema, y los agregamos al bol. Añadimos igualmente el extracto de vainilla.
- Agregamos a continuación la harina de cucharada en cucharada, sin dejar de batir a velocidad baja, hasta integrarla toda en una masa blandita, pero que no se debe casi pegar a los dedos.
- Dividimos la masa en dos partes. Ponemos cada parte encima de un papel de hornear, o un tapete de silicona, la aplastamos con las manos y ponemos otro papel encima. Extendemos la masa con el rodillo hasta un grosor mínimo de 4 mm.
- Extendemos ambas mitades de la masa, las ponemos sobre una bandeja y las metemos en la nevera por lo menos tres horas, pero no mucho más o habría que envolverlas en plástico.
- Una vez pasado el tiempo de reposo sacamos la primera mitad de la masa a la encimera y dejamos que se temple un poco. Si está demasiado dura resulta difícil despegar el molde de calabaza, que tiene unas ranuras un poco intrincadas en los bordes.
- Cuando la masa esté un poco templadita procedemos a marcar las galletas con el molde de calabaza. Hay que tener cuidado al despegar el molde, es mejor empezar a levantarlo por el lado opuesto al rabito. Para ello tiene la boca, que permite meter el dedo dentro del molde y también despegar la masa si se queda pegada al molde.
- Dejamos las galletas cortadas sobre el mismo papel de hornear, lo pasamos a una bandeja de horno y las cocemos unos 15 minutos a 180º, sin aire. Cuando estén doradas las pasamos a una rejilla para que se enfríen. Y a celebrar Halloween aunque alguno nos mire mal.
Este cortador en concreto tiene un buen tamaño, las galletas salen grandotas, por eso no salen muchas. Así que no os empachéis.
Esa hermosa calabaza de trapo que uso en las fotos procede de los Estados Unidos, de una vez que pasé allí dos meses y medio por trabajo. La enviamos a España en la valija de documentación de la empresa, ejem. Los que estábamos allí destinados no sabíamos que revisaban los envíos antes de hacerlos… debieron flipar, los pobres, con las cosas que mandábamos: calabazas de trapo, moldes de árbol de Navidad, etc.
Y ya tenemos un dulce de Halloween relativamente poco complicado y que será un éxito seguro en vuestra casa. Que sí, que no hay crío ni adulto que se resista al aroma a vainilla de estas divertidas galletas calabaza.
meimei dice
hija, qué galletas más monas, por Dios. Me pasa lo que a tí, que mis churumbeles (y yo) cumplimos años a velocidades supersónicas. Y se nos nota. A mí en la cara y en todos lados, y a ellos en que ya pasan de todas estas historias bastante. Pero puedo decir: «no es por celebrar jalobin ni nada de eso, voy a hacer galletas porque se me apetece» . Y punto pelota.
Miriam Garcia dice
Jeje, así me gusta, porque yo lo valgo!
teresa dice
Hola…a mis niñ@s les encantan las galletas de mantequilla y uso mi propia receta, pero me ha gustado muchísimo esta, y además tengo este cortapasta…
El caso es que tengo una pregunta, ¿la masa se puede congelar?, es que lo de tener que esperar 3 horas me complica mucho la elaboración.
Mil gracias por todo
Miriam Garcia dice
Sí, puedes sustituir el tiempo en nevera por un congelado, eso sí, siempre bien envuelta la masa en plástico para que no se reseque en el congelador ;).
Beatriz dice
Hola Miriam, tus recetas siempre son de 5,claras en las explicaciones, interesantes y divertidas en los previos, y las fotos enganchan, ¿Porque receta me inclino? ….esta claro y nunca defraudan. Enhorabuena!!!no dejes de publicar.
Miriam Garcia dice
Muchas gracias, Beatriz, un placer tener lectores así ;).